En un duelo vibrante en la Rod Laver Arena, Andrey Rublev logró avanzar a los cuartos de final del Abierto de Australia tras vencer a un combativo Álex de Minaur, que cautivo al público con el mejor punto en lo que va del torneo. A pesar de las especulaciones sobre las limitaciones del ruso en los Grand Slam, el experimentado singlista de 26 años demostró su capacidad para llegar a las rondas finales.
El partido comenzó con Rublev aprovechando la timidez inicial del tenista local, logrando tomar la delantera en el primer set. Aunque el australiano mostró resistencia y llevó al ruso al límite en momentos decisivos, la potencia y jerarquía de Rublev inclinaron la balanza a su favor. En la segunda manga, ambos protagonizaron intercambios frenéticos, con desplazamientos vertiginosos y esfuerzos constantes por dominar el punto. De Minaur logró igualar el partido, en lo que significó su mejor versión de la jornada. Sin embargo, el tercer parcial fue un espectáculo de alto nivel, que se caracterizó por la batalla de los intérpretes.
La verdadera transformación se produjo en el cuarto set, cuando Rublev, tras un breve paso por el vestuario, reordenó tácticamente su juego y desató su poderosa derecha. A pesar de algunos intercambios de quiebres de servicio, el ruso respondió de manera contundente, asegurando una ventaja decisiva en el marcador. Así, pudo cerrar el partido con un contundente 6-0 en el quinto set, asegurando su pase a los cuartos de final, donde se enfrentará a Jannik Sinner. Pero en el recuerdo quedará el “punto imposible” de Alex De Minaur que puso contra las cuerdas al potente singlista ruso.
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