Martín Palermo, exentrenador de Platense y máximo goleador histórico de Boca Juniors, reveló en una entrevista reciente varias situaciones y sentimientos tras la elección de Juan Román Riquelme como presidente del club.
Palermo, quien esperaba dirigir a Boca en caso de que la fórmula opositora ganara las elecciones, expresó su sorpresa por el respaldo abrumador a Riquelme. El exdelantero destacó que nunca fue contactado por los dirigentes actuales ni por el expresidente Daniel Angelici para asumir el cargo de director técnico en el equipo. Afirmó que las diferencias con Riquelme, presentes desde su etapa como jugadores, han persistido a lo largo del tiempo.
En cuanto a la posibilidad de dirigir Boca, Palermo fue directo al decir que no cree que Riquelme lo llame y que, de hacerlo, sería por algún interés particular. Además, reconoció que no quiere generar expectativas falsas a los hinchas y que, de momento, ve difícil dirigir al club de sus amores.
En relación con su vinculación política, Palermo mencionó la propuesta de Mauricio Macri para que sea el entrenador de Boca en caso de ganar las elecciones. Aunque admitió que la idea le fue presentada, decidió seguir en Platense en ese momento. Palermo también compartió su experiencia al ser increpado por hinchas de Riquelme durante las elecciones, lamentando que lo llamaran «traidor». Además, expresó su desconcierto por los insultos hacia Macri, a quien considera el presidente más exitoso de la historia de Boca.
Palermo cerró la entrevista hablando sobre la sensación de división en el club y afirmó que, a pesar de las circunstancias actuales, se ve a sí mismo sentado en el banco de Boca en algún momento futuro, demostrando su deseo de dirigir al equipo.
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